EL ESPACIO DE LAS LETRAS

viernes, 18 de marzo de 2016

Los ancestros y la luciernaga

Quizá unos sabios no compartan las noches de alegría desbordantes pero en lo mas profundo del bosque se encuentran hadas diminutas capaces de hacer reir al mas tonto enjaulado en la pudedumbre de la vida insípida como ellos. Tal vez no entiendan que la vida es simplemente rara, a veces mágica a veces oscura, siempre libre. Y en la cumbre de las aceras de asfalto solo los mas sagaces y valientes esperen junto al desafio, porque el desafío solo puede ser sorteado por aquellos que no imprimen segundos por horas. Entonces en la noche mas oscura alguien andará tocando cuerdas en tu cabecita loca y cabrosa y expenderá las mas sutiles palabras de amor y te devolverá al ser, al que ya no es pero sigue siendo el ahora. Y los mas ancianos gritarán de escándalo, como una polilla oscura y gris ha logrado colarse en nuestras ventanas. Es ahí donde staré yo, en una de mis espirales profundas cuidando de mi hada favorita y pidiendo no, aclamando...aclamando al dios divino de la tierra que no abandone mis energías mas sutiles que a veces hacen tanto daño y otras rozan el delirio.
Entre tanto ella, que me subleva, que me impacienta, que me pide a gritos mas de lo que soy y lo que fui en luz y yo sin poder reirme me rio y vuelvo a entorpecer los pasos de esa polilla inflamable que se quiere reir de lo nuestro.
Mas no vivirá para siempre y en mi regreso haremos pompas de javón junto a la ventana para que vuelen hacia esa luna que tanto le gusta a ella y tanto le lloro yo.
Te amo hadita esperanza, porque solo tu puedes entender mis subterfugios de vida y muerte. Solo tu me pasas, solo tu me arrullas, solo tu me das esperanzas y solo tu vuelves patas arriba el debo con el soy y el tengo con el quiero y el puedo con el eterno sabos de la culpa de no hacerlo lo suficientemente bien.
Pero eso también cambiará y seremos una entre varios, un ying-yang cualquiera que acontecerá en la noche de brujas sin miedos, sin ira, sin rencor. Solo con la esperanza cualquiera de ver de nuevo luciérnagas y alumbrar con ellas a los sabios, a los tristes, a los desesperados....a los que nos vieron crecer.

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